El CBD no crea adicción. Numerosos estudios han demostrado que el cannabidiol, el componente no psicoactivo de la planta de cannabis, no crea adicción. A diferencia de THCel componente psicoactivo del cannabis, el CBD no produce una sensación de "subidón" o euforia que pueda conducir a la adicción. De hecho, se ha demostrado que el CBD tiene beneficios terapéuticos potenciales para una variedad de afecciones, entre ellas ansiedaddolor e inflamación.
La Organización Mundial de la Salud ha declarado que, en general, el CBD es bien tolerado y presenta un buen perfil de seguridad. En una revisión de la literatura, la OMS no encontró pruebas de problemas relacionados con la salud pública asociados con el uso de CBD puro. Además, la OMS informó de que el CBD no presenta efectos indicativos de ningún potencial de abuso o dependencia.
El CBD actúa interactuando con el sistema endocannabinoide del organismo, que interviene en la regulación de diversos procesos fisiológicos, como el estado de ánimo, el apetito y la sensación de dolor. Se cree que el CBD ayuda a regular el sistema endocannabinoide, lo que podría explicar sus posibles efectos terapéuticos.
Una de las razones por las que el CBD no es adictivo es que no produce un efecto de tolerancia. La tolerancia se produce cuando el cuerpo se acostumbra a una sustancia y necesita dosis mayores para conseguir los mismos efectos. Con el CBD, éste no es el caso. De hecho, algunos estudios han demostrado que el CBD puede reducir el comportamiento de búsqueda de drogas en personas adictas a sustancias como los opiáceos.
Es importante señalar que, aunque el CBD en sí no es adictivo, algunos productos de CBD pueden contener trazas de THC, el componente psicoactivo del cannabis. Estos productos se conocen como productos de CBD de espectro completo y pueden contener hasta 0,3% de THC por ley. Aunque es poco probable que esta cantidad de THC produzca un "subidón", sigue siendo importante ser consciente de los riesgos potenciales asociados al THC, especialmente para las personas que pueden ser sensibles a sus efectos.
En conclusión, el CBD no es adictivo. Tiene un buen perfil de seguridad y no produce un efecto de tolerancia. Aunque algunos productos de CBD pueden contener trazas de THC, el riesgo de adicción es mínimo. Para los clientes y el público del Reino Unido, es importante estar informado sobre los beneficios potenciales del CBD y tomar decisiones educadas sobre su uso.